COMO PREPARAR NUESTRO ARTE FINAL PARA EL LABORATORIO
Para que el resultado de nuestra impresión sea óptimo, debemos seguir una serie de pasos antes de exportar nuestro archivo o arte final. Debemos tener en cuenta varios factores que serán clave a la hora de un buen resultado.Sabemos que realizar el arte final de un trabajo de impresión puede llegar a ser un poco tedioso y más si es tu primera vez. Por eso os dejamos aquí una guía sencilla para facilitaros este proceso y que os evitará posibles problemas, retrasos o sobrecostes.

COMO REVISAR NUESTRO ARCHIVO O ARTE FINAL
DIMENSIONES
Debemos revisar con esmero las medidas definitivas que tendrá nuestro documento y que este sea el mismo que vamos a seleccionar en nuestro proceso de compra. El tamaño de nuestro arte final debe ser el mismo que el tamaño de impresión que deseamos realizar y nunca ser distinto, pues el archivo podría perder calidad e incluso perder zonas de impresión si no se ajusta a las dimensiones adecuadas.

COLOR
Tenemos que garantizar que todos los valores cromáticos de nuestra pieza sean correctos. Para la producción en nuestro laboratorio digital contamos con impresoras de inyección de tinta de última tecnología Epson® Impresión Giclée de la máxima calidad y fidelidad en la reproducción de los colores. Tus archivos deberán ser enviados en formato de color RGB. Si se trata de fotografía: utiliza el perfil sRGB IEC6196-2.1 Si hablamos de ilustración: utiliza el perfil Adobe RGB (1998)

IMÁGENES
Todas las imágenes que no sean vectoriales o vectores deben contar con un mínimo de 300 ppp, para garantizar una óptima impresión. A la hora de exportar el archivo debes elegir la opción GUARDAR COMO, ya que a veces al exportarlo de otra forma el archivo cambia y no se guarda de la forma correcta y necesaria para ser impresa. También debe guardarse en un formato que sea abierto y compatible como JPG o TIFF, si buscáis un formato de alta calidad y sin compresión.

TEXTO
Si tu pieza incluye texto o algún título es imprescindible revisar la ortografía, para evitar posibles disgustos, y trazar todas las tipografías; contornear los trazos para que pase de ser una tipografía editable a una forma vectorial. Consejo: antes de trazar estas tipografías asegurarte de guardar una copia del archivo original para evitar perder esta información y guardar en un nuevo fichero.
