Cómo nos gustan las parejas como Lidia y Frank que buscan que su gran día tenga mucho de todo y muy bueno, emoción, estilazo, sorpresas y fiestón.
El traje de Frank ya es toda una demostración de intenciones, era su día y lo iba a dar todo. Lidia tampoco se quedo atrás. Con su ramo de Romanescu y la decoración floral con brócoli y coliflor hizo un guiño y un homenaje a su padre y a su profesión.
Uno de los momentos top fue cuando se cambió de vestido y apareció en medio de la celebración con uno mucho más de fiesta. Ver la carita que se le quedó a Frank al verla no tiene precio.
Y la fiesta estuvo a la altura de todos los invitados que hicieron más de 500 kilómetros desde Barcelona para acompañarlos en su gran día. P.d: Cuando toda la boda termina haciendo el trenecito significa que ha sido un grandísimo éxito.
Llamamos aperitivo fotográfico a la selección que enviamos a los novios la semana después de la boda.
Normalmente están de viaje de novios cuando la reciben y os podéis imaginar el subidón de revivir estos pequeños-grandes momentos aún con la resaca emocional del gran día.
En esta selección nos gusta mostraros también la importancia de los detalles, miradas, anécdotas e invitados que también son protagonistas ese día.
La boda de Lydia y Frank fue celebrada en Larache, el salón de celebraciones más bonito de Murcia, y más aún con la decoración exterior y flores de la marca Delirios. La novia iba guapísima con su vestido blanco de la marca de novias Casa Juana y zapatos de la marca Xti. Frank sorprendió con su traje de novio conjuntado con los zapatos de la tienda Señor.
La experiencia junto a Silvia y el resto del equipo fue estupenda y la
recordamos con mucho cariño. Disfrutamos mucho de la jornada y nos
hicieron sentir realmente cómodas durante todo el shooting. Lo que más
nos gustó fue esa naturalidad con la que nos iban guiando, se nota que
les gusta su trabajo y saben lo que hacen. Fue un ensayo perfecto e
inspirador para nuestra boda real unos cuantos meses después. ¡Gracias
por regalarnos ese día tan bonito!
Yo me casé en 2012 y mi decisión fue unánime para elegir como fotógrafo a La Cámara Roja por su frescura, creatividad, diferencia, originalidad y seriedad. Lo recomiendo 100%, si volviera a casarme no lo dudaría. Estoy fascinada por su trabajo y como puede expresar sentimientos en tan solo una imagen.
Unas fotos maravillosas, sin forzar posturas, sin tener que posar. Vosotros solamente disfrutáis y ellos se encargan de captar con toda naturalidad los momentos y los detalles. No dudaríamos en volver a contar con La Cámara Roja para un próximo evento.
Son muy profesionales. El trato fue y es excelente, de lo más personal. Nos hicieron sentir super cómodos y captaron cada momento de una forma única. Su fotografía nos encantó y supimos que serían ellos desde que cruzamos la puerta de su estudio. Nos prepararon un photocall que todos nuestros invitados recuerdan; ¡divertidísimo!
Siempre que necesitemos un fotógrafo, acudiremos a ellos sin dudarlo. Muy recomendables.
Tanto mi marido y yo hemos quedado encantados con el reportaje fotográfico que nos han realizado David y Silvia de La Cámara Roja, porque han sabido captar muchos gestos naturales, ciertos detalles que podrían pasar desapercibidos, la espontaneidad de la gente debido a que no se nota que están… Recomendaría el servicio sin lugar a duda.
Si quieres que os acompañemos a vosotros también, solo tienes que ponerte en contacto con nosotros para que podamos conocer vuestras ideas e inquietudes, y así plantear un trabajo pensado en exclusiva por y para vosotros.
Os invitamos también a que echéis un vistazo a nuestras Preguntas Frecuentes, donde resolvemos las dudas y cuestiones más habituales.